El presidente Salvador Sánchez Cerén afirmó a los dirigentes del sistema bancario que la reciente reforma fiscal aprobada por la Asamblea Legislativa, propuesta por el gobierno, no ha sido elaborada con la intención de dañar al sector financiero, “sino con la necesidad de obtener mayores recursos al Estado para garantizar la sostenibilidad a toda la inversión social que ha generado una nueva dinámica en el país”.
El gobernante hizo un llamado a que se retiren los recursos de inconstitucionalidad presentados sobre esta reforma, el cual fue retomado por los presidentes de los bancos, asegurando que analizarían con seriedad dicha propuesta.
Sobre este tema, el ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, el lunes pasado, durante la entrevista Diálogo, de Canal 21, señaló que los altos directivos del Banco Agrícola, así como del Banco Azteca, habían pedido a los presidentes de dichas instituciones bancarias en el país, retirar el apoyo a la demanda de inconstitucionalidad que se promovía por los representantes de la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA), contra el impuesto a las transacciones financieras.
El presidente Sánchez Cerén también ha propuesto la creación de una mesa técnica, que estaría coordinada por el secretario Técnico y de Planificación, en la cual se abordarían de forma conjunta distintos temas relacionados con el sector financiero en aras de contribuir al desarrollo económico del país.
“Entre el gobierno y el sistema financiero ha existido una relación muy estrecha, de mutua cooperación. Nosotros queremos reafirmar que seguimos con esa voluntad, estamos en toda la disposición de mantener los mecanismos de diálogo y de conversaciones más sistemáticas con ustedes”, dijo el mandatario en el encuentro desarrollado en Casa Presidencial.
Junto al presidente Sánchez Cerén estuvieron presentes el vicepresidente y comisionado para la Inversión, Óscar Ortiz; el ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, y los secretarios Técnico y de Planificación, Roberto Lorenzana; de Gobernabilidad y Comunicaciones, Hato Hasbún; y el Secretario Privado de la Presidencia, Manuel Melgar.
Por el sector financiero, acudieron al encuentro el presidente de la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA), Armando Arias; el presidente del Banco Agrícola, Rafael Barraza; el presidente del Banco Azteca, Jesús Pérez Crespo; el presidente del Banco Citi, Juan Miró; y el presidente del Banco Davivienda, Gerardo Simán.
También asistieron el presidente del Banco de América Central, Raúl Cardenal; la presidenta del Banco Hipotecario, Nora López; el presidente del Banco Promérica, Eduardo Quevedo; el presidente del Banco Scotiabank, Sergio Cruz; la gerente general del Banco G&T Continental, Lorena Rubio; y el vicepresidente del Banco Azul, Alfredo Pacas Díaz.
El presidente de ABANSA expresó al mandatario salvadoreño que como sector financiero comparten totalmente su visión: “nosotros estamos siempre absolutamente abiertos al diálogo, abiertos a la conversación y todo tendiente a mejorar el país social y económicamente”.
Después de la reunión los banqueros se marcharon confirmando el carácter dialogante, no confrontativo y compromiso del Presidente por mejorar el país, en el cual “le acompañarán en un cien por ciento”, según dijo el presidente de ABANSA, Armando Arias.
Cifras del Ministerio de Hacienda, desde la puesta en marcha en septiembre de 2014 del impuesto a las transacciones financieras, dan cuenta que se ha logrado recaudar $6.7 millones hasta la fecha y en 12 meses esperan lograr entre $100 y $120 millones.