Con los recursos, se creará un fideicomiso que impulse la recuperación económica de las MIPYMES, el mismo se construiría con $600 millones para las empresas registradas como patronos en el ISSS. El dictamen se aprobó con 56 votos a favor y 25 en contra.
Para recuperar la economía de las empresas salvadoreñas, con énfasis en las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) afectadas por la crisis derivada de la pandemia COVID-19; la Asamblea Legislativa autorizó al Ejecutivo para que gestione y coloque títulos valores de crédito hasta por $1 mil millones de dólares. Este monto también podría ser obtenido por medio de préstamos o por una combinación de ambas opciones, hasta completar la cantidad que se autoriza.
Con los recursos, se creará un fideicomiso que impulse la recuperación económica de las MIPYMES, el fiduciario será el Banco de Desarrollo de El Salvador (BANDESAL). La distribución consignada en el decreto avalado se plantea de la siguiente manera:
$600 millones se destinarán para construir el fideicomiso, a fin de impulsar la recuperación económica de las empresas registradas como patronos en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y empresas informales afectadas por la pandemia. Estos fondos se colocarán de la siguiente forma: $140 millones para el Programa de Subsidio para los Empleados de las micro, pequeña y mediana empresa registradas como patronos en el ISSS; $360 millones para un Programa de Otorgamiento de Crédito, fundamentalmente en línea de capital de trabajo para las empresas registradas como patronos en el ISSS, con prioridad a las MIPYMES; $100 millones para un Programa de Financiamiento Productivo para empresarios del sector informal, fundamentalmente en capital de trabajo que permita la recuperación económica y que tengan al menos un crédito vigente en el sistema financiero nacional o sistema financiero cooperativo y que posea categoría de riesgo crediticio A o B, al 29 de febrero 2020.
Por otra parte, $400 millones serían destinados para reforzar el Presupuesto General del Estado, de los cuales $100 millones se utilizarían para el pago a los exportadores de la devolución del impuesto a la transferencia de bienes muebles y prestación de servicios, y $300 millones irían al pago de obligaciones de proveedores del sector privado del Estado de El Salvador.
De optar por la emisión de títulos valores, deberán colocarse para un plazo de hasta 40 años y podrá amortizarse en cuotas periódicas. Si se elige la contratación de uno o varios créditos, estará sujeto a un plazo de hasta 35 años que incluya un período de gracia y se amortizará en pago de cuotas semestrales consecutivas.