El sábado 20 de junio, en las instalaciones de la Biblioteca del Centro, se realizó el Primer Festival de Literatura, el cual contó con interpretaciones musicales y representación teatral acerca de la literatura con el objetivo de acercar a la lectura a las personas de una manera divertida y dinámica.
La actividad estuvo a cargo de la Licda. Rocío Linares, quien fungió como coordinadora del Festival Literario. Dicho festival dio inicio a las 3 de la tarde, sin embargo para causar mayor impacto en las personas, se decidió trasladarlo a las afueras de la Biblioteca, llevándolo a cabo en el Parque Libertad.
Durante la realización del festival, se involucró a las personas que por curiosidad se habían quedado en el parque a observar la actividad, mostrándose muy interesados y al mismo tiempo aprendiendo sobre las épocas, las cuales iban desde la edad de piedra hasta el modernismo.
“Este proyecto es para que los jóvenes que les gusta la lectura, vengan y nos acompañen a leer un buen libro. La biblioteca pronto hará del conocimiento de las personas de los horarios en que esta estará abierta, para que tanto los padres con sus hijos se hagan presente a leer y disfrutar un ambiente sano y agradable.”, comentó Ambroci, integrante del grupo Dejavu.
Para la Licda. Rocío los valores por la lectura que se han perdido gracias a la tecnología ha provocado que los jóvenes de ahora no sepan acerca de la literatura pasada, ni de la historia de El Salvador, es por eso que con la realización de este tipo de actividades el grupo Dejavu y a la Biblioteca del Centro buscan revivir esos valores perdidos.
“Me pareció muy buena la iniciativa, que estos jóvenes hagan este tipo de actividades ya que hacen reflexionar acerca de los valores que hemos perdido por dedicarle más tiempo a la tecnología que a un libro”, expresó Karla Vanegas.
Tanto el grupo Dejavu como los organizadores del Festival Literario, hicieron la invitación a los santanecos para que se acerquen en familia a la Biblioteca del Centro para salgan de la rutina y así fomentar un buen hábito a los más pequeños de casa, que serán las futuras generaciones.
Por: Rodrigo Zetino
