El mítico estadio Oscar Alberto Quiteño de la ciudad de Santa Ana, volvió a disfrutar de las mieles de gloria que solo el fútbol puede dar, el fútbol y el futbolista más grande que ha visto nacer el pulgarcito de América, Jorge González, cariñosamente conocido como El Mágico.
En un partido de exhibición entre los veteranos de Club Deportivo FAS y la plantilla actual del equipo asociado, chicos y grandes disfrutaron de sendas jugadas de ambos equipos, uno plagado de estrellas como Guillermo «Memo» Rivera, William Renderos Iraheta, Fulgencio Bordón, Adolfo «Fito» Menéndez, William Osorio y por supuesto Jorge «El Mágico» González y el otro con la oportunidad de hacer historia frente a íconos del futbol santaneco.
El encuentro fue organizado con el objetivo de generar fondos en beneficio de los jugadores del equipo tigrillo, quienes, como por todos es conocido, atraviesan una difícil situación económica, la cual se ha empeorado con señalamientos de corrupción en partidos por la Liga de Campeones de CONCACAF.
El partido finalizó con un empate a dos goles por bando, sin embargo más allá del resultado los jugadores demostraron su satisfacción por haber participado de este evento deportivo, «Para mí es un privilegio, primero que me hayan tomado en cuenta, luego estar acá porque aquí crecí como futbolista, estamos colaborando con nuestro granito de arena en la situación que está atravesando nuestro equipo», fueron las palabras de William Renderos.
«Yo nunca había visto jugar al Mágico, es otro nivel, ya casi no corre pero el toque no lo ha perdido» comenta un joven de apenas 17 años, aun emocionado por haber tenido la oportunidad de ver al jugador emblema de todos los salvadoreños.
Por su parte Jorge González aseguró que «estoy a las ordenes de las acciones que signifique algo de solidaridad para un mejor llevar, es poca cosa, el equipo está pasando una cosa muy desagradable pero es una actitud de solidaridad», en torno al objetivo benéfico que perseguía el encuentro deportivo.
Una vez más, el engramillado se llenó de magia, una magia que arrancó suspiros a todos los santanecos que allá por la década de los 90´s vitorearon al equipo con más títulos en todo El Salvador, Club Deportivo FAS.