Al terminar las fiestas decembrinas es probable que los pacientes regresen a consulta con aumento de peso, parámetros clínicos alterados y por ello, renuentes a la valoración médica.[1] Sin embargo, esta época también es percibida como una oportunidad ideal para fijar nuevas metas de salud, entre las que destacan llegar al peso ideal y dejar hábitos dañinos a la salud, como fumar.[2] Para facilitar el logro de estas metas desde el consultorio, en esta ocasión se presentan 4 pasos clave, que incluyen recomendaciones prácticas de dos médicos y parten de estrategias basadas en evidencia.
1. Realizar una valoración integral al paciente.
El primer paso es llevar a cabo una evaluación integral del estado de salud de los pacientes, examinando aspectos como cambios en el peso, hábitos alimenticios, niveles de actividad física y estado emocional. La Dra. Giselle Maldonado Antúnez, médica residente de cirugía, advierte que es común que los pacientes regresen a las consultas con alteraciones en sus valores clínicos después de las festividades.
Por lo mismo, recomienda la realización de una somatometría completa, incluyendo mediciones de glucemia capilar y estudios de laboratorio para quienes comiencen el año en condiciones poco óptimas, para así identificar y manejar desequilibrios surgidos en el periodo festivo.
2. Ajustar y derivar en caso de ser necesario.
Después de la evaluación integral, es esencial adaptar los planes de salud, ajustando aspectos como el tratamiento farmacológico, la dieta o la actividad física. Es muy probable que los pacientes no hayan alcanzado sus metas de salud, en cuyo caso, el Dr. Carlos Daniel Coronado Alvarado, médico general y maestro en ciencias de la salud, recomienda implementar estrategias de control. «Como médicos, debemos realizar una evaluación para identificar qué acciones positivas no se llevaron a cabo o qué acciones perjudiciales se adoptaron, y cómo estos comportamientos afectaron su salud. Basándonos en esta información, debemos desarrollar un nuevo plan junto con el paciente para corregir o minimizar los impactos negativos que hayan surgido. Si es posible, hay que [referirlos] a especialistas como nutriólogos, psicólogos o médicos deportivos».
El Dr. Coronado enfatiza la necesidad de reconocer los desafíos y logros del paciente, para motivarlo a mantener los hábitos saludables. Esto es clave para promover un avance continuo y duradero en la salud. Además, destaca cómo las emociones negativas, como la culpa o desmoralización, pueden influir en el manejo de la salud y llevarlo a una actitud pasiva o incluso a la evitación de las consultas médicas. Por ello, propone el modelo SELF (Selección, Educación, Logística, Seguimiento) durante todo el año, para fomentar una relación de confianza y apoyo con el paciente y que este se sienta acompañado en la búsqueda de sus objetivos de salud.
3. Aprovechar la temporada para establecer nuevas metas con estrategias breves y basadas en evidencia.
Con la llegada de un nuevo año, se presenta la oportunidad ideal para que los pacientes establezcan nuevas metas de salud. Es el momento de aplicar estrategias breves y basadas en evidencia para ayudarles a definir y alcanzar sus objetivos. Esta etapa no solo se trata de corregir, sino de aprovechar el impulso para fijar y seguir metas que mejoren su calidad de vida a largo plazo.
Un método efectivo para lograr esto es la entrevista motivacional, herramienta clínica para generar estrategias motivacionales que contribuyan al cumplimiento de metas hacia conductas más saludables, que está estructurada en cuatro pasos: conectar, enfocar, evocar motivación y planificar. Este proceso ayuda al paciente a involucrarse y sentirse capaz de hacer cambios positivos en su salud. Paralelamente, la planificación de acciones breves es una técnica que complementa a la entrevista motivacional o funciona independientemente para fomentar el autocontrol. Inicia con preguntas sobre cambios específicos que le gustaría hacer, como dejar de fumar o ejercitarse más. Si el paciente está dispuesto, se le asiste en la implementación del enfoque SMART para incrementar la probabilidad de éxito, además, puede adaptarse según su disposición para cambiar.
4. Promover la autoeficacia para dar continuidad a esas metas.
Finalmente, nos interesa dar continuidad al tratamiento. El seguimiento médico representa un desafío considerable, especialmente en sistemas de salud donde los recursos y el tiempo de los profesionales suelen ser limitados. Sin embargo, la consistencia en el seguimiento es esencial para el éxito a largo plazo del tratamiento. Por ello, promover la autoeficacia, definida como la confianza en la propia capacidad para adoptar un comportamiento, es tan importante. La autoeficacia es un predictor clave en el logro de metas de salud, como aumentar la actividad física, mantener una dieta saludable y dejar de fumar.[3]
Una estrategia efectiva es animar a los pacientes a llevar un registro de su progreso. El automonitoreo ha demostrado mejorar significativamente los resultados en la salud, especialmente para aquellos con enfermedades crónicas, pues fomenta una participación más activa en su cuidado y refuerza su autoeficacia.[4] Además, compartir historias de éxito de otros pacientes que han superado desafíos similares puede ser muy motivador, ya que proporciona ejemplos concretos de estrategias exitosas.[5] De igual forma, reconocer y abordar los obstáculos individuales, incluyendo el contexto, los sentimientos de culpa o desánimo, puede ayudar a mejorar su apego al tratamiento.
Puede resultar útil tener en el consultorio hojas impresas para que los pacientes registren su progreso y ofrecer estímulos, como estrellas o calcomanías, para reforzar su progreso. Aunque estos incentivos se usan comúnmente en pediatría, pueden ser igualmente efectivos como refuerzo positivo para adultos, en tanto que fomentan la adherencia y celebran los logros en el camino hacia un estilo de vida más saludable.
Conclusión
El inicio del año es una excelente oportunidad para reforzar la salud y bienestar de los pacientes. Mediante una valoración integral, ajuste personalizado de planes, establecimiento de nuevas metas y fomento de la autoeficacia se pueden abordar los retos que surgen tras las festividades decembrinas. A la par, es fundamental mantener un enfoque centrado en el paciente, donde se reconozcan sus esfuerzos y se les anime a superar los desafíos con una actitud positiva, así como a adoptar estrategias basadas en la evidencia, como la entrevista motivacional y el enfoque SMART.
La Dra. Maldonado y el Dr. Coronado Alvarado han declarado no tener ningún conflicto de interés económico pertinente.