La migraña es una enfermedad neurológica crónica caracterizada por crisis de cefalea pulsátil, a menudo unilateral, que se exacerban con la actividad física. Los síntomas típicos de la migraña son fotofobia, fonofobia, náusea, vómito y con frecuencia alodinia cutánea.
Las migrañas incluyen a veces síntomas visuales o sensoriales que se clasifican como migrañas con aura. Estas auras afectan aproximadamente a un tercio de las personas que padecen migrañas y suelen aparecer antes de que empiece el dolor de cabeza, aunque también pueden presentarse durante o después de la migraña.
La migraña afecta cada año a más de mil millones de personas en todo el mundo y se encuentra entre los cinco principales motivos por los que la gente acude a los Servicios de Urgencias.
El tratamiento de la migraña incluye farmacoterapia aguda (abortiva) y preventiva (profiláctica).[3] Los pacientes con crisis frecuentes suelen necesitar ambas. También suelen ser aconsejables las medidas dirigidas a reducir los factores desencadenantes de la migraña. ¿Conoce los aspectos clave de la prevención y el tratamiento de la migraña?