Se trata de la startup Cannabotech, la cual se ubica en Herzliya.
Granja de cannabis en Israel. Foto: Seach Cannabis Farm
La startup Cannabotech, con sede en Herzliya, afirma que, con la combinación de hongos medicinales y el cannabis, se podría reducir la quimioterapia que los pacientes precisan. “Sabemos que los pacientes necesitan una cantidad mínima de quimioterapia. Pero muchas personas no pueden sobrevivir a esto debido a los efectos secundarios, por lo que suspenden el tratamiento”, explicó Elchanan Shaked, director ejecutivo de Cannabotech.
El tratamiento de Cannabotech no solo disminuye la cantidad de quimioterapias, sino que es hasta seis veces más efectivo para eliminar células cancerosas con una quimioterapia estándar. La empresa apunta a cinco tipos de cáncer para empezar: de mama, páncreas, colon, pulmón y próstata.
El estudio inicial se llevó adelante con la dirección de la profesora Tami Peretz, oncóloga sénior del Centro Médico Hadassah. En compañía del doctor Isaac Angel, un farmacólogo israelí especializado en desarrollo de fármacos.
El cannabis medicinal ya se receta a personas con cáncer para bajar el dolor y las náuseas. Pero la dosis resulta compleja: mucho THC, el componente psicoactivo de la planta, puede dejarlos volando alto y sin funcionar por muchas horas diarias.
“Una proporción significativa de pacientes con cáncer activo actualmente son tratados con cannabis en paralelo con el tratamiento convencional”, dijo Peretz. “Los productos integradores desarrollados por Cannabotech son únicos porque están desarrollados con estándares similares a los de la industria farmacéutica y combinan varios agentes activos”.
Y agregó: “Los productos de la empresa han demostrado una actividad impresionante y muy prometedora en cultivos celulares probados en laboratorio. Sobre la base de estos experimentos, hay espacio para explorar la posibilidad de integrar los productos en el tratamiento de pacientes con cáncer de mama”.
Por su parte, Cannabotech está desarrollando un kit de personalización que se estrenará a mediados de este año. Se analizará un caso puntual, con pruebas genéticas y metabólicas para ver cuál de las 11 formulaciones se ajuste al régimen de quimioterapia recetado por el subtipo de cáncer.
En Israel, la compañía posee sus plantas en Medocann, una granja de cannabis de interior líder. El tratamiento no necesitará el ok de la FDA o la CE si un estado o país legalizó el cannabis para los consumidores.