Por Carma Hassan, Michelle Watson
(CNN Business) — El prominente televangelista cristiano y activista antivacunas Marcus Lamb murió después de ser hospitalizado con covid-19, anunció su familia este martes.
Lamb fundó la red de televisión cristiana Daystar Television Network en 1997.
Su esposa, Joni Lamb, anunció la muerte del televangelista en el programa de Daystar transmitido este martes en Facebook. Dijo que su esposo tenía diabetes pero estaba sano y que fue hospitalizado después de que le diagnosticaran covid-19.
«Nunca hablaba de eso, pero tenía diabetes, aunque la mantuvo bajo control. Estaba muy sano, comía sano, mantenía su peso bajo y siempre mantenía su azúcar en un buen nivel. Pero al intentar tratarse por el covid y la neumonía, los diferentes protocolos que se usan, incluidos muchos de los que hablamos aquí en Daystar, y los usamos, y los usé y pasé rápidamente por covid… Hizo que su nivel de azúcar en la sangre se disparara y solo una disminución de su oxígeno y por eso fue al hospital, para poder tener oxígeno», dijo Joni Lamb. “Él creía al 100% en todo lo que hemos hablado aquí en Daystar y ayudó a tantas personas en todo el mundo con los primeros tratamientos de protocolo para covid. Todavía mantenemos esa postura, obviamente”.
Joni Lamb dijo que el corazón de su esposo «se rindió”.
Marcus Lamb a menudo se pronunciaba en contra de las vacunas del covid-19 en su programa. En un episodio a principios de este año con los activistas antivacunas Robert F. Kennedy Jr. y Del Bigtree, Lamb dijo que la vacuna contra el covid-19 «no era realmente una vacuna», sino una «inyección experimental» que era «peligrosa». Marcus Lamb alegó que las personas estaban muriendo o tenían trastornos neurológicos a causa de la vacuna.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) dicen que las vacunas contra el covid-19 «son seguras y efectivas» y que cualquier acontecimiento adverso después de la vacunación «es poco común pero puede ocurrir». Las personas que no están vacunadas contra el covid-19 tienen 11 veces más probabilidades de morir a causa de la enfermedad y 10 veces más probabilidades de ser hospitalizadas con la enfermedad, según un estudio publicado por los CDC.