El "Padre Sam", sacerdote salvadoreño solicitará la dispensa del estado clerical. - Periódico EL Pais

El «Padre Sam», sacerdote salvadoreño solicitará la dispensa del estado clerical.

El «Padre Sam», sacerdote salvadoreño solicitará la dispensa del estado clerical.
P. Samuel Bonilla. | Crédito: Captura de pantalla Youtube Cathopray

El P. Samuel Bonilla Amaya, sacerdote de origen salvadoreño que ha trabajado en países como Honduras y México; y es conocido en las redes sociales como el “Padre Sam”, anunció que solicitará la dispensa del estado clerical.

El Padre Sam fue ordenado diácono el 20 de junio de 2015 y recibió la ordenación sacerdotal el 16 de enero de 2016. Es el menor de siete hermanos y fue también colaborador de ACI Prensa y ChurchPop.

En un video publicado en sus redes este 15 de noviembre, el sacerdote de 34 años de edad, señaló: “Después de un muy buen tiempo de reflexión, de acompañamiento espiritual, humano y psicológico, en libertad y conciencia, y en diálogo con las autoridades competentes, he tomado la decisión de solicitar al Santo Padre la dispensa del estado clerical, esto es mi renuncia al ejercicio del sacerdocio ministerial”. “Esto significa que ya no administraré los sacramentos y seguiré las diligencias canónicas que esto conlleva. Seguiré siendo sacerdote para siempre, pero ya no voy a ejercer mi ministerio sacerdotal. Voy a solicitar la dispensa”, continuó.

El Código de Derecho Canónico establece en el canon 290 que “una vez recibida válidamente, la ordenación sagrada nunca se anula”. Sin embargo, el clérigo puede solicitar la dispensa del estado clerical, que de acuerdo al canon 292 significa que “pierde con él los derechos propios de ese estado, y deja de estar sujeto a las obligaciones del estado clerical”.

El sacerdote, que en junio cambió el nombre de sus redes sociales de Padre Sam a Cathopray, explicó que esta decisión le ha tomado años. “Ha sido difícil, pero en este momento es una decisión que tomo con mucha paz en mi corazón. Está de más decir que no estoy renunciando a la Iglesia, mucho menos a mi fe católica”.