Cierre de Los Chorros expone vulnerabilidad vial y desafío ambiental en El Salvador - Periódico EL Pais

Cierre de Los Chorros expone vulnerabilidad vial y desafío ambiental en El Salvador

Cierre de Los Chorros expone vulnerabilidad vial y desafío ambiental en El Salvador

El tramo de Los Chorros, ubicado en la carretera Panamericana de El Salvador, es una vía crucial que conecta el occidente del país con San Salvador. Este segmento, de aproximadamente 8 kilómetros, atraviesa la Cordillera del Bálsamo y es conocido por sus pendientes pronunciadas, taludes inestables y propensión a deslizamientos de tierra, especialmente durante la temporada de lluvias .

El cierre total del tramo de Los Chorros desde el 29 de abril de 2025 debido a deslizamientos provocados por lluvias ha puesto en evidencia la histórica vulnerabilidad de esta crucial vía que conecta el occidente del país con la capital. Esta interrupción afecta directamente a más de 70 mil vehículos diarios y ha impactado la actividad económica de San Salvador.

El Gobierno salvadoreño, a través del Ministerio de Obras Públicas (MOP), ha extendido el cierre hasta el 11 de mayo mientras ejecuta trabajos de estabilización de taludes, incluyendo cortes de terreno, anclajes profundos y drenajes subterráneos. Como medida de mitigación, se ha habilitado transporte público gratuito.

Esta situación ocurre en el contexto del ambicioso proyecto Viaducto Francisco Morazán, que busca ampliar la carretera a ocho carriles y construir un viaducto de casi un kilómetro de longitud. Con una inversión de más de $370 millones, la obra promete mejorar la conectividad entre San Salvador y el occidente, aunque también ha generado preocupación ambiental, ya que afectará a más de 5,700 árboles y varias especies en peligro de extinción, según el Ministerio de Medio Ambiente.

Los Chorros ha sido históricamente una zona de alto riesgo. En el terremoto de 2001, un gran deslizamiento sepultó la carretera. Expertos han advertido que la estabilización permanente de la zona requiere inversiones constantes, monitoreo técnico y medidas como cortes en bermas, muros de contención, anclajes y reforestación técnica.

Durante el cierre, también se han impuesto restricciones al transporte de carga en rutas alternas para reducir la congestión y prevenir accidentes.

El caso de Los Chorros refleja las consecuencias de la centralización del desarrollo en la capital, donde la actividad comercial, laboral y recreativa sigue altamente concentrada.