El Presidente de la República de China (Taiwán), Ma Ying-jeou, calificó el viernes 17 el reciente ataque contra un desarmado barco pesquero de Taiwán por una patrullera armada gubernamental de Filipinas en las aguas de coincidencia de los dos países, como un asesinato a sangre fría.
El día 9 de mayo a las 10 de la mañana, el barco taiwanés “Guang Da Xing.28” tuvo un desafortunado encuentro con la patrullera del Buró de Pesca y Recursos Acuáticos de Filipinas a 164 millas náuticas de Cabo Eluanbi, el punto más al sur de Taiwán, cuando aquello estaba faenando en las aguas de coincidencia de los dos países. La lancha filipina abrió fuego con armas automáticas contra el barco desarmado taiwanés. El incidente le costó la vida de Hong Shih-cheng, pescador taiwanés de 65 años de edad, uno de los cuatro miembros de la tripulación. Su muerte desencadenó indignación en el pueblo de Taiwán.
Inmediatamente del incidente, el Gobierno de la República de China (Taiwán), a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores, dio a conocer su postura oficial pidiendo al Gobierno filipino asumiera “plena responsabilidad” por el execrable ataque contra un barco pesquero taiwanés por parte de una lancha patrullera filipina en las aguas de coincidencia de los dos paísess. El canciller Lin incluso dijo en una conferencia de prensa pidiendo al Gobierno filipino presentar sus excusas oficiales por el incidente de ataque, castigar a los funcionarios involucrados y proporcionar la debida compensación.
Sin embargo estas peticiones, no se han concretizado por parte del Gobierno de Filipinas.
Ante esta actitud, Taiwán ha planteado una serie de sanciones contra Filipinas, entre las medidas se puede mencionar suspensión inmediata del procesamiento de todas las solicitudes presentadas por trabajadores filipinos para laborar en Taiwán, así como llamar de regreso al representante de Taiwán en Manila.
Por otra parte, se verán suspendidos los intercambios de alto nivel entre los dos países, así como todos los intercambios económicos, la cooperación agrícola, pesquera, de ciencia y de tecnología, las negociaciones de aviación, el retiro de Filipinas de su programa de exención de visados, y la emisión de una alerta de viajes a Filipinas para que los ciudadanos taiwaneses se abstengan de visitar ese país del Sudeste Asiático y la realización de maniobras militares en las aguas al sur de Taiwán.
Taiwán se caracteriza por ser una nación con temperamento pacifico, sin embargo, este incidente ha desencadenado protestas y recolecciones de firmas contra el gobierno filipino, por lo que el presidente Ma Ying-jeou y varias agencias gubernamentales de Taiwán han pedido al pueblo taiwanés no descargar su enojo sobre unos 87.000 filipinos que actualmente están trabajando o viviendo en Taiwán.
Ma expresó también sus esperanzas que las relaciones entre Taiwán y Filipinas no fuesen afectadas por las actuales diferencias bilaterales, pero que la justicia internacional debe ser respetada.