SANTA ANA: PASARELAS EN MAL ESTADO - Periódico EL Pais

SANTA ANA: PASARELAS EN MAL ESTADO

Doña Marta esperó al menos tres minutos para poder cruzar la calle, eran aproximadamente las once treinta de la mañana y el tráfico comenzaba a ponerse pesado, la señora de al menos unos treinta y cinco años de edad logró evadir los automóviles con una rápida carrera para poder llegar hasta el otro lado sin ser golpeada.

Lo que llamó poderosamente mi atención es que justo en esa calle se encuentra ubicada una de las pocas pasarelas que hay en la ciudad morena, ¿Por qué no usa la pasarela? –Pregunté- al momento que la señora terminaba de llegar hasta el lugar donde yo me encontraba “cállese, me puedo caer de ahí” -me respondió-, ¿Se marea?, “no, no es eso, ya vio como está de fregada esa cosa, ahí uno bien y se quiebra una pierna” fue la respuesta.

La pequeña plática que sostuve con Doña Marta, me llenó de curiosidad y me “arriesgue” a cruzar por la pasarela, dicen que para poder contar hay que haberlo vivido, y fue eso precisamente lo que hice…

La pasarela ubicada frente a la Escuela República de Guatemala, en la Aldea San Antonio está en muy malas condiciones, aunque tal vez en una buena parte de ella se encuentra firme hay áreas que se han convertido en intransitables, principalmente para niños y personas de la tercera edad.

“Esta en mal estado, las gradas ya no sirven, no tienen bases de cemento y peligra meter los pies ahí” nos comenta José Murillo, habitante de la zona, por su parte don Alberto Alfaro se lamenta el estado en el que se encuentra la pasarela “ahí cruzan niños pequeños, porque yo lo he visto, esto es una negligencia de los directores de esa escuela porque no han venido a ver ese problema” nos indicó.

Durante el tiempo que permanecí en aquel lugar fueron más de quince personas que cruzaron por debajo de la calle, arriesgando –al igual que Doña Marta- su integridad física. A pesar de la existencia de las pasarelas en algunos puntos de la ciudad muchas personas no las usan ya sea por ahorrar tiempo, por temor o por el mal estado en el que se encuentran. El llamado a las autoridades competentes a que pongan manos en el asunto y eviten que las personas pongan en riesgo su vida, atravesándose la calle por debajo de las pasarelas.

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