Comunicado de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos
ante la situación de acefalía institucional
Como es de conocimiento público, desde el pasado 9 de agosto del año en curso, la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) se encuentra en situación de acefalía, debido a la falta de acuerdos al interior del Órgano Legislativo para elegir a la persona titular que estaría al frente de la institución y dado que, por ser la Procuraduría una entidad amparada en la teoría del Órgano institución-persona, su representación recae únicamente en la figura del Procurador o Procuradora para la Defensa de los Derechos Humanos, y de conformidad a lo establecido en el artículo 15 de la ley orgánica de la institución, dicha titularidad, al terminar el periodo de su nombramiento, no puede ser sustituida por ningún otro funcionario o funcionaria.
No obstante lo anterior, se comunica a la población que la PDDH continúa brindando sus servicios para la protección de los derechos humanos, tales como la recepción de denuncias, asistencia a las víctimas, verificaciones y vigilancia de la situación de las personas privadas de libertad.
Pese a ello, se debe señalar que la situación de acefalía genera retrasos y obstáculos para cumplir y desarrollar a plenitud el mandato constitucional de la PDDH en cuanto a la protección y defensa de los derechos humanos, afectando la emisión de resoluciones, pronunciamientos, con las consecuentes exhortaciones, recomendaciones o señalamientos de responsabilidad. También afecta el posicionamiento y seguimiento institucional sobre casos emblemáticos en materia de derechos humanos.
Por otra parte, en la medida de lo posible, la institución continúa desarrollando sus labores administrativas con normalidad, salvo en lo que se refiere a la firma de contratos y acuerdos, para lo cual se requiere firma del titular. Sin embargo, de prolongarse la situación de acefalía, podrían afectarse procesos administrativos esenciales para el cumplimiento de las actividades de promoción y protección de los derechos humanos, como por ejemplo la presentación del proyecto presupuesto institucional para 2017 ante el Ministerio de Hacienda.
Ante lo anterior, se espera que la actual situación se solucione en el menor tiempo posible, evitando que se prolongue de tal forma que termine por afectar el funcionamiento institucional y los servicios a la población en pro de la defensa y protección de los derechos humanos.
San Salvador, 11 de agosto de 2016