Luego de su detención el martes 7 de diciembre en Londres por estar acusado de violación y acoso sexual, el creador de la plataforma Wikileaks, Julian Assange, defendió su sitio de internet diciendo que es crucial para propagar la democracia.
Assange, un australiano de 39 años, sacudió a la opinión pública y al Gobierno de EE. UU. con la revelación de 250.000 cables diplomáticos secretos. En un artículo publicado por el periódico The Australian, cuyo propietario es Murdoch, con el título “No disparen al mensajero por revelar verdades incómodas”, Assange apeló a defender Wikileaks de los ataques y amenazas.
Assange apela a defender Wikileaks
El australiano, que niega los cargos en su contra por violación y. acoso sexual, seguirá detenido hasta el 14 de diciembre. Luego de la detención de Assange, Wikileaks publicó otros 46 documentos secretos en la noche del martes 7 de diciembre. Entre otras cosas, los mensajes revelaron que Libia presionó más de lo que se pensaba al Reino Unido para que liberara al culpable del atentado de Lockerbie. Una vocero de Wikileaks, Kristinn Hrafnsson, escribió en Twitter: “no permitiremos que se nos silencie, ni a través de acciones judiciales, ni a través de la censura”.
Después de su detención, Julian Assange dijo que Wikileaks era el chivo expiatorio del Gobierno de los EE. UU. En Australia se culpa a EE. UU. por la divulgación de los cables diplomáticos y el ministro de Exteriores australiano, Kevin Rudd, dijo que los responsables legalmente hablando eran los que filtraron originalmente los documentos, y no Assange.
«El Sr. Assange no es en sí mismo responsable por la divulgación no autorizada de 250.000 documentos de la red de comunicaciones diplomáticas estadounidenses. Los estadounidenses son responsables de ello», dijo Rudd a la agencia Reuters en una entrevista.
¿Quién es el culpable?
Aunque no se conoce la fuente original de la filtración, un soldado .estadounidense que trabajaba como analista de inteligencia en Irak, Bradley Manning, ha sido acusado por autoridades militares de descargar sin autorización más de 150.000 cables del Departamento de Estado. Pero nadie en EE. UU. quiso decir si esos son los mismo cables que ahora está publicando Wikileaks.
Mientras el fundador de Wikileaks, Julian Assange aguarda la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales este jueves, sus seguidores han reunido buena parte de la fianza.
Entre tanto sus simpatizantes han recaudado buena parte de la fianza necesaria para su liberación. El abogado de Assange, Mark Stephens dijo esta mañana a la BBC que sus seguidores habían reunido la mitad de la fianza consistente en 200.000 libras esterlinas, equivalentes a unos 240.000 euros. Entre las celebridades que apoyan la causa de Assange se encuentra el cineasta británico Ken Loach, la millonaria Jemima Khan, el cineasta estadounidense Michael Moore y la ex modelo Bianca Jagger, que fuera esposa de Mick Jagger.
Los abogados del editor australiano advierten que lo que se busca es ganar tiempo para permitir a los fiscales estadounidenses preparar una acusación por espionaje contra Assange.
. Abogados contra la extradición Su posible extradición a Suecia levanta olas en la capital británica. En una carta publicada en el diario The Times, juristas renombrados se han pronunciado en contra su extradición a Estados Unidos, desde el Reino Unido o a través de Suecia, país que lo pide para investigar posibles delitos sexuales.
Los 30 firmantes, entre los que se encuentran Phil Shiner y Bill Bowring, señalan que la Justicia británica tiene responsabilidades muy serias a considerar como son la libertad de prensa, el Estado de derecho así como evitar malos tratos e incluso la aplicación de la pena capital.
“Wikileaks ha revelado graves violaciones de los derechos humanos y del derecho humanitario internacional, revelaciones que han posibilitado que las víctimas de algunos de esos atropellos se hayan visto resarcidas”, afirman.
El diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung advierte en su edición de este miércoles sobre los ánimos del otro lado del Atlántico, donde los medios reflejan el odio que ha despertado Assange con sus revelaciones sobre la diplomacia estadounidense y cómo personas que antes defendían la libertad de expresión como el valor máximo, la han supeditado a un nuevo concepto tras los atentados del 11 de septiembre. “El derecho a la libertad de expresión está subordinada a la seguridad nacional”, dijo el senador demócrata Joe Lieberman.
Entre tanto la Fuerza Aérea de Estados Unidos bloqueó en sus computadoras las páginas Internet de los medios que publican los despachos diplomáticos estadounidenses revelados por Wikileaks, según informó The Wall Street Journal en su edición online. Los medios afectados fueron The New York Times, el diario británico The Guardian, el español El País, el francés Le Monde y el alemán Der Spiegel.
Quien quiera acceder a alguno de esos medios a través de un ordenador de la Fuerza Aérea verá en la pantalla “Acceso denegado, El uso de Internet es registrado y monitoreado”. El Ejército, la Marina y la Infantería de Marina no bloquearon esos sitios, indicó «The Wall Street Journal».
Autora: Eva Usi
Editor: Pablo KummetzDeutsche Welle