El próximo 26 de abril entrará en vigor el Reglamento Técnico Centroamericano (RTCA) “Productos de Petróleo, Aceite Combustible Diésel, Especificaciones”, que obligará a los importadores de combustible a traer diésel bajo en azufre. Esta es una de las medidas más importantes para reducir las emisiones producidas por el parque vehicular y mejorar la calidad del aire, así lo manifestó la ministra de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Lina Pohl, en el marco del taller dirigido a importadores y distribuidores de combustibles y vehículos.
La entrada en vigencia de este reglamento significa que el diésel deberá contener como máximo 500 partes por millón de azufre. En la actualidad es de 5 mil partes por millón, lo que significa una reducción del 90%.
Este cambio en la fórmula de diésel implica que, al quemarse con menor azufre durante el proceso de combustión, habrá una menor emisión de contaminantes a la atmósfera.
Del 100 % del parque vehicular en el país, únicamente el 2.2 % corresponde a trasporte público, que genera el 51 % de emisiones de material particulado, y la mayoría del transporte público utiliza diésel, por lo que se espera un impacto muy positivo en la mejora de la calidad del aire.
“Es imposible limpiar el aire o reducir la contaminación del aire generada por el sector transporte, sin eliminar el azufre de los combustibles. El azufre es por sí mismo un contaminante, pero más importante aún es que el azufre impide la adopción de las principales tecnologías para el control de la contaminación”, expresó Pohl.
Esta medida también permitirá que los importadores de vehículos traigan al país automotores más eficientes en combustión y los importadores de diésel, combustible de mejor calidad y rendimiento.
La funcionaria agregó que la calidad del aire en El Salvador, sobre todo de aquellas ciudades o zonas urbanas donde existe gran presencia de transporte público y privado, congestionamiento vehicular, además de transporte aéreo o marítimo, se encuentra relacionada con la calidad de combustibles utilizados por estos medios de transporte, así como de la tecnología con la que estos vehículos operan.
Otra de las medidas anunciadas por la titular del ramo ambiental es la actualización de la normativa de emisiones atmosféricas de fuentes móviles y la generación de un programa de verificación vehicular que se está trabajando con apoyo del Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático de México (INECC).
También se desarrollará el proyecto “Combustibles Limpios y Vehículos Más Eficientes”, con el apoyo de ONU Ambiente, Centro de Gestión Tecnológica e Informática Industrial (CEGESTI), de Costa Rica; y Centro Mario Molina, de Chile, que permitirá tener insumos para generar políticas necesarias con el fin de mejorar la calidad del aire del país.
Los anuncios fueron hechos durante la inauguración del taller de inicio de este proyecto con representantes de distribuidores, importadores de vehículos y de diésel, así como de la Corte Suprema de Justicia, Policía Nacional Civil, Ministerio de Economía, Consejo Nacional de Energía, Ministerio de Salud, Ministerio de Obras Públicas, Banco Central de Reserva, Superintendencia de Competencia, UCA, UES, e ITCA, entre otras instituciones.
El encuentro denominado “Taller de Combustibles y Vehículos Más Limpios y Eficientes” busca consolidar la línea base de emisiones y del consumo de combustible de vehículos livianos como insumo para fortalecer los estándares nacionales de calidad de combustibles, de emisiones vehiculares y promover la eficiencia energética en el transporte liviano para la mitigación de emisiones de CO2 y otros contaminantes.
Especialistas de ONU Ambiente, Centro de Gestión Tecnológica e Informática Industrial (CEGESTI), de Costa Rica; y Centro Mario Molina, de Chile, darán a conocer iniciativas y experiencias de políticas de economía de combustibles en América Latina.
La ministra agradeció el apoyo técnico en la construcción del plan y reiteró el llamado a los empresarios importadores a que se sumen al esfuerzo. “Sin reducir el azufre de los combustibles, no dará resultado ninguna estrategia de reducción significativa de la contaminación del aire”, finalizó.