El Fiscal General de la República Lic. Douglas Meléndez presentó esta mañana el Plan Estratégico Institucional 2018-2022, cual contempla los ejes estratégicos de representar, defender y tutelar con efectividad y transparencia los intereses de la sociedad y del estado, conforme a los principios de legalidad, justicia y objetividad.
La Fiscalía General de la República ha dado un paso importante al definir la dirección, objetivos, indicadores y metas como parte de su planeación estratégica para los próximos cinco años, alineando todas las actividades, acciones y recursos en la consecución de su ideal superior, como es el de constituirse como una Institución independiente y autónoma, reconocida por el cumplimiento de sus atribuciones y facultades constitucionales y legales a nivel nacional e internacional.
El trabajo institucional para la elaboración del Plan Estratégico duró alrededor de 7 meses, con la participación de más de 300 empleados institucionales, en 78 talleres, en los que se acordó trabajar sobre cinco líneas estratégicas, con las que se persigue de forma positiva consolidar el fortalecimiento de la gestión interna para mejorar la eficacia en la persecución del delito; el cual establece el alcance de las metas del plan, exige del compromiso, trabajo y aporte de todos los que conforman la Fiscalía, orientando el plan estratégico a generar una cultura de desempeño que surge de la medición de indicadores orientados a la optimización de los recursos.
“Este plan 2018–2022, persigue lograr el fortalecimiento de las capacidades para una efectiva y eficaz investigación y persecución del delito, en sus más diversas manifestaciones”, expresó en su discurso el Fiscal General.
El Plan Estratégico descansa y se complementa en los Planes Operativos Anuales, programas y acciones específicas que persiguen el fortalecimiento de la investigación del delito, que abraza los sistemas y procesos tecnológicos, que privilegia las capacidades y competencias de su capital más valioso, el recurso humano, que aspira alcanzar la autonomía financiera y armonizar sus procesos jurídico – administrativos y financieros, en consonancia con los criterios y principios establecidos en su renovada Política de Persecución Penal.
Un legado en el tiempo que fue posible gracias al apoyo del Pueblo y Gobierno de Los Estados Unidos de América, a través de USAID/CHECCHI.