Periódico El País
Una mujer de 32 años de edad y su sobrina de ocho perdieron la vida el pasado domingo 12 de
enero al ser arrolladas por un vehículo particular a la altura del kilómetro 63 ½ del bulevar Nicolás
Salume en Santa Ana. Según la información brindada por las autoridades de tránsito terrestre de la
Policía Nacional Civil las dos féminas intentaban cruzarse la calle cuando fueron impactadas por el
automotor placas particulares 625-721.
La policía también explicó que las víctimas caminaban sobre el paso peatonal, por lo que se
deduce que el motorista se conducía a excesiva velocidad y no logró detenerse antes de llegar a la
pasarela. No obstante, fue el conductor quien inmediatamente detuvo su marcha y dio parte a las
autoridades de lo ocurrido y se quedó en la escena.
Las víctimas mortales fueron identificadas como Yenni Lissette López Méndez y la menor Jennifer
Jiménez Hurtado. Según algunos familiares ambas regresaban de realizar sus compras en un
supermercado cuando ocurrió el percance.
El responsable del hecho será acusado del delito de Homicidio Culposo, sin embargo no fue
detenido por la policía debido a que se quedó en el lugar, lo que es una atenuante al delito
según el Fondo Nacional para Víctimas de Accidentes de Tránsito (Fonat). El oficial encargado del
procedimiento explicó que únicamente trasladaron al motorista para que brindara su declaración
de lo ocurrido.
“Nosotros consideramos que hay una velocidad inadecuada de parte del conductor a quien
tenemos previamente con custodia policial hasta determinar lo que va a decir la Fiscalía General
de la República”, manifestó el oficial de tránsito terrestre, Osmaro Jiménez.
La velocidad máxima permitida en el by pass es de 80 kilómetros por hora debido a que es una
zona considerada semi urbana. Las primeras inspecciones evidenciaban que hubo abuso de
velocidad en este accidente.
La escena del accidente se mantuvo en el lugar por aproximadamente tres horas, por lo que se
generó una fuerte carga vehicular en la zona. Los vehículos livianos utilizaron una vía alterna,
mientras que los contenedores tuvieron que esperar hasta que Medicina Legal retirara los cuerpos
y habilitaran el paso.
Decenas de curiosos se hicieron presentes al lugar para presenciar lo ocurrido, muchos
reconocieron que en este lugar los automovilistas no respetan los límites de velocidad y que ello
vuelve muy difícil que los peatones puedan cruzar de un lado a otro la calle.