Ante el impacto de las altas temperaturas, con más de 25 días acumulados sin lluvias y las pérdidas de cosechas que los agricultores empiezan a reportar, Cruz Roja Salvadoreña ha iniciado sus labores de monitoreo en las zonas más afectadas del país.
Desde el pasado mes de junio, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, aseguro que el país ha presentado una sequía meteorológica severa en algunas partes del territorio nacional, y según los datos recopilados por la entidad, hay un gran porcentaje de cultivos que se encontraban en estado de estrés y algunos con graves daños; hasta esa fecha se reporta un 43% de cultivos con daño irreversible, un 53% con estrés moderado, y un 3% en estado normal, solo en la zona oriental del país; en la región paracentral, el 13% de las plantaciones presentaban un nivel de daño severo, el 60% en estrés moderado y un 25% en situación normal, y en la zona central se estimaba que un 5% con daño irreversible, un 68% en estrés hídrico y un 25% aun con probabilidad de desarrollo, sin embargo estas estadísticas a la fecha han generado algún aumento por el alargamiento del estado de sequía que se vive en el país.
Se estima que a finales de julio habrá un 75% de daños y pérdidas en la meta esperada de producción de 20 millones de quintales de maíz, y 150,000 quintales de frijol.
“A raíz de la temporada de sequía Cruz Roja Salvadoreña realiza evaluaciones de la situación que se está generando en la zona oriental del país, para determinar donde hay necesidades humanitarias y que tipo de acciones se podrían implementar para apoyar a las comunidades afectadas, por lo que Cruz Roja efectúa visitas de campo que brindan insumos para tener un panorama más claro, y determinar la ayuda; entre los departamentos visitados está San Miguel, Usulután y La Unión, donde se sostuvieron reuniones con funcionarios del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal, CENTA, y el Gobernador de la zona, con quienes se coincidió que esta problemática tiene gran impacto en la economía local y se prevé que una de las necesidades primordiales, son la alimentación y el agua para familias de escasos recursos que tendrán que esperar entre tres y cuatro meses hasta que potencialmente la próxima cosecha tenga éxito, esto a corto plazo, y a mediano plazo se deberá fortalecer los sistemas de captación de agua, además de promover medios de vida diversificados que contribuyan a la economía familiar”, dijo Roy Venegas, Director de Operaciones de Emergencias.
La afectación de la sequía en la región, no solamente ha dejado daños en los cultivos de maíz, sino que también en los de frijol y café, asimismo se han visto afectados los pescadores artesanales, el sector ganadero, entre otros problemas generados.
Para Fernando Benítez, presidente de la Asociación de Ganaderos de Morazán, la situación es desesperante y necesitan una pronta salida para apaciguar su situación “decenas de productores están acarreando el agua, comprándola, elevando sus costos de mantenimiento de ganado, ya no encontramos que darle a nuestros animales, porque recursos ya no poseemos”, dijo Benítez.
Por otra parte, la producción de leche ha bajado significativamente, un 10% o más comento el ganadero, debido a que la relación de alimento-cultivos-agua, termina afectando a los bovinos.
De igual forma, los costos en el país siguen en aumento, pues desde el pasado día 15 del presente mes la tarifa de la energía eléctrica se incrementó un 4.5% y esto, según la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones, Siget, se debe a que el país está generando energía con más petróleo debido a la época seca.
El fenómeno del niño sigue avanzando, pues la Dirección General del Observatorio Ambiental del Ministerio de Salud y Recursos Naturales (MARN) prevén un nuevo periodo sin lluvia a partir del próximo 25 de julio, expertos aseguran que es una canícula que generará otros 15 días más sin lluvias.
La situación es cada vez más agravante, a tal grado que las autoridades del país proponen racionar el abastecimiento de agua, afectando así aún más a las poblaciones y sus medios de vida, por lo que se hace un llamado de solidaridad para contar con el apoyo técnico y financiero, y así poder solventar las diferentes necesidades que han surgido a raíz de la emergencia, a través de la ejecución de proyectos de asistencia humanitaria por parte de Cruz Roja para mejorar las condiciones de crisis de la población.
Considerando el grave impacto para acceso a los medios de vida de las familias afectadas, y analizando que muchas familias por su situación de pobreza podrían entrar en el muy corto plazo en una crisis humanitaria, ya que sus recursos para comprar alimentos y agua se podrían ver nulos o muy reducidos, Cruz Roja Salvadoreña recomienda:
En el corto plazo:
- Distribución de agua potable en comunidades donde no haya sistemas comunitarios de agua o pozos. (de uno a tres meses o mientras dure la sequía).
- Distribución de paquetes alimenticios para familias agriculturas de muy escasos recursos.
- Distribución de paquetes básicos agrícolas para el siguiente periodo agrícola.
En mediano plazo:
- Restauración de sistemas de agua para consumo humano y sistemas para irrigación agrícola y ganadería.
- Promoción de siembra diversificada de productos agrícolas y más resistentes a las sequias.
- Educación en uso de suelos y retención de agua.
En el largo Plazo:
- Ejecución de Programas de Reforestación