Con el cierre del mes cívico en El Salvador, los niños de todos los rincones del país estaban a la espera de su día, el tradicional y mundial “Día del Niño”, el cual como su nombre lo dice honra y festeja a todos aquellos pequeños que dan alegría y vida a un país.
La mayoría de instituciones públicas y privadas de todo el país, suspendieron clases para celebrar tan importante día a los infantes y la Ciudad Morena no fue la excepción, ya que escuelas como la Tomás Medina y Napoleón Ríos; colegios como Bautista, Liceo San Luis y Salesiano San José celebraron a lo gran tal día, asimismo profesores encargados de tales instituciones se sumaron a la celebración.
El día oficial para celebrar el Día Universal del Niño y Niña es el 1º de agosto, aunque cada país ha elegido una fecha para celebrarlo. En México se festeja el 30 de abril, en Nicaragua el 1º de Junio, y en Panamá el tercer domingo de julio. En Uruguay se festeja el segundo domingo de agosto, en Costa Rica el 9 de setiembre, en Honduras el 1º de setiembre, y en El Salvador y Guatemala el 1º de Octubre. En España el día 20 de noviembre ha quedado institucionalizado como Día Internacional de los Derechos del Niño, o Día Universal de la Infancia.
En su día los niños reciben regalos y son festejados sobre todo en las escuelas en los niveles de preescolar y primaria. También se realizan convivios en horas del refrigerio, en donde los estudiantes elaboran distintos aperitivos para luego degustarlos en los salones de clases.
Las instituciones que se encargan de celebrarlo, difunden entre los niños sus derechos y obligaciones, aunque es deber de los padres reforzar los mismos, junto con los valores que se inculcan.
Tal día, es una jornada de reflexión respecto a los problemas de la infancia en el mundo, y está dirigido a fomentar el interés y una mayor participación de la ciudadanía en temas que tienen que ver con la educación, la formación de valores, la protección, y la promoción de los derechos de niños y niñas.
La misión en ese día tan especial fue: olvidarse de los quehaceres diarios que se implementan en los centros educativos y pasar un momento de sana diversión, fomentando buenos valores en sus diferentes actividades.
Por: Rodrigo Zetino