Caminar por la ciudad de Santa Ana, no es nada grato para muchos de sus habitantes, ya que consideran la ausencia de las rejillas en las alcantarillas son un verdadero peligro para quienes no se no se percata del inconveniente y podrían caer en ellas. Este comentario parece ilógico pero es lo más valedero, especialmente en época de lluvia que el agua turbia sube de nivel y pobre el que vaya caminando y no se percate de la muerte que puede encontrar adelante si cae en esa fosa, convirtiéndose en un lamentable suceso.
Este problema se ve en la mayoría de las calles y avenidas de la ciudad morena ya que los chatarreros sin escrúpulos compran todo tipo de artículos de metales que puedan vender a las empresas fundidoras salvadoreñas.
Pero el problema no es exclusivo para los peatones sino también para los conductores de vehículos. «Hace meses conducía mi vehículo y giré sobre una calle por la cual no suelo transitar, y para mala suerte la alcantarilla en esa esquina no tenía su tapadera rejilla y grande fue el susto cuando la llanta delantera quedó trabada; gracias a Dios no me convertí en una cifra más de accidentes de tránsito pues no venía nadie atrás de mí y pude salir de esta por mi cuenta, pero el vehículo sufrió un pequeño daño» dijo un joven santaneco a este medio.
A pesar de los esfuerzos de la comuna anterior y esta, la solución reside en colocar tapaderas de cemento y cada semana enviar inspección a los chatarreros y multarlos si llevan alguna de estos elementos, que son propiedad municipal y por ende de los santanecos.
Otro problema que ocasiona eso es que muchas personas ocupan las alcantarillas de basurero, por lo que en época lluviosa colapsan y provocan inundaciones en diferentes puntos de la Cuidad Morena.
Se le hace un llamado a las autoridades correspondientes a escuchar a la ciudadanía y buscar la manera de resolver estos problemas que afectan a los habitantes y para que la ciudad tenga una mejor imagen ante los visitantes.